En el contexto de la reunión del Comité Europeo de Veolia, celebrada en septiembre de 2024 en París, se han presentado algunas de las principales líneas estratégicas que marcarán el futuro del grupo. El sector energético se ha posicionado como una de las mayores fortalezas para compensar otras divisiones, como la del agua y los residuos, que en algunas zonas, como España, han sido afectadas por circunstancias externas, especialmente la sequía.
Un sector del agua estancado en España
En España, el sector del agua está experimentando una fase de estancamiento. Las condiciones climáticas adversas, con una sequía persistente, han impactado directamente en los resultados, con escasos beneficios generados. Esta situación ha resaltado la importancia de la diversificación en el modelo de negocio de Veolia, que ha encontrado en el sector energético una herramienta clave para compensar estas dificultades.
La energía y la descarbonización, pilares de futuro
De cara a los próximos años, Veolia tiene una clara estrategia basada en la inversión en sectores con previsiones de beneficios. Entre ellos destacan el ahorro energético, la descarbonización, el reciclaje de plásticos, la biomasa, la energía solar y las pequeñas centrales nucleares. Esta apuesta refleja el compromiso del grupo con la sostenibilidad y la necesidad de adaptarse a un mercado que demanda soluciones ecológicas.
Uno de los puntos clave será reducir el consumo energético mientras se incrementa la producción, todo ello con una inversión significativa en energías ecológicas. En este marco, la descarbonización es un objetivo prioritario, acelerando los procesos para reducir la huella de carbono mediante nuevas tecnologías y modelos energéticos sostenibles.
El Plan Green Up: un liderazgo en la lucha contra el cambio climático
El Plan Green Up (2024-2027) se ha presentado como el proyecto estratégico de Veolia para liderar la transición ecológica. Con este plan, la empresa busca "enverdecer" sus procesos, disminuyendo la producción de CO2 en sectores clave como el agua, la energía y los residuos. Este compromiso no solo se centra en el liderazgo empresarial, sino también en la lucha global contra el cambio climático.
La compra de Suez, una de las operaciones más destacadas del grupo, ha permitido aumentar la dimensión y capacidad de Veolia para afrontar estos retos. Aunque no se prevé un gran crecimiento en las actividades tradicionales (agua municipal, residuos sólidos no peligrosos y calefacción urbana), sí se apostará por nuevas soluciones como la desalación, la eliminación de contaminantes y la energía renovable, especialmente el biogás.
Mirando hacia el futuro con optimismo
A pesar de las dificultades que presentan algunos sectores, Veolia se mantiene optimista de cara al futuro, gracias a su capacidad de adaptación y su visión basada en la sostenibilidad. La inversión en sectores ecológicos y su compromiso con la descarbonización posicionan a Veolia como un actor clave en la transición hacia un mundo más sostenible.
En resumen, la estrategia de Veolia para los próximos años se basa en la combinación de solidez y adaptabilidad, con una apuesta decidida por la innovación y el liderazgo en la lucha contra el cambio climático. Estos son los pilares sobre los cuales se construirá el futuro del grupo, siempre con la vista puesta en las necesidades globales de sostenibilidad y eficiencia energética.